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Hace 100 años, en México se festejó el Centenario de la Independencia. NO hubo grandes juegos pirotécnicos, ni desfiles ostentosos, ni acrobacias. Lo que sí hubo fue la construcción de obras públicas para el beneficio del pueblo: trenes, monumentos, calles, drenaje, grandes avenidas y mejoras a la Universidad.
No se cuánto habrá invertido en todo eso el General Porfirio Díaz, lo que sí se, es que comparación con este gobierno Porfirio demostró tener mucho más amor al país de lo que tiene Calderón.
Que uno de los personajes históricos más villanos en la historia de México, odiado por el ser generador de desigualdades sociales y enemigo de la democracia según los ideólogos de estos tiempos modernos, sea comparado con Calderón y aún así ganarle en imagen es una cosa grave.
Mucho se ha criticado el ostentoso presupuesto que se gastó el gobierno de Felipe Calderón para los festejos del Bicentenario. Las cifras están entre los 1,600 millones de pesos y los 3 mil millones de pesos.
Este gobierno "tiró la casa por la ventana" como se dice por ahí: gastó en juegos pirotécnicos sin chiste ni gracia a cargo de un extranjero, en donde no aparecieron los clásicos toritos, ni los castillos ni las coronas, tan sólo fuentes chillonas que aparentaban un incendio en Palacio Nacional; se hicieron desfiles con carros alegóricos que no le llegaban ni a la mitad de los carros del Desfile de las Rosas; se trajeron acróbatas, artistas y varias cosas más. Todo esto para que el pueblo, admirara la grandeza de este espectáculo... desde la comodidad de su televisor.
Además de la ostentosa y poco ética cantidad de dinero gastado (salido de nuestros impuestos y con cosas más urgentes que resolver), el gobierno de Calderón animó a la gente a que no se presentara en el Zócalo Capitalino pues era "riesgoso", sin contar con el tráfico y las calles cerradas por el propio gobierno. Una acción elitista para que "la masa" no afeara el espectáculo. En cambio, se pidieron voluntarios para llenar la plancha del Zócalo.
Así que además de los 28 mil muertos, la violencia en el país, la guerra interminable y el enorme desempleo. Felipe Calderón será recordado por gastarse el dinero de los mexicanos en un espectáculo excluyente que no le aportó nada a la nación y que insulta su memoria histórica.
Eso sí, el Secretario de Educación afirmó sin ninguna duda: "Estoy satisfecho con el trabajo realizado porque la gente estaba contenta, feliz". Y amenaza con hacer algo similar para festejar la Revolución.
Para finalizar, les dejo la pregunta del día:
¿Qué haría usted con 1,600 millones de pesos?
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